martes, 7 de septiembre de 2010

La semana que viene será mejor, seguro.

¡Jo! Qué difícil me resulta algunas veces ponerme a escribir. Mientras que hay días que parece que las palabras me salen solas, otros es como si tuviera que rascarme el estómago por dentro para poder vomitar cuatro o cinco frases con las que luego, la mayoría de las veces no me siento nada satisfecha…
Estoy ahí, dale que te dale a la novela en la que estoy trabajando, y aunque tengo claro lo que quiero contar no soy capaz de encontrar la palabra justa… a este paso voy a acabar comiéndome hasta las uñas de porcelana (¡y mira que están duras!) Quiero avanzar porque se me agolpan las ideas en la cabeza (otra vez) pero cuando me siento delante de lo último que escribí hace unos días ¡Puff! se evapora el espíritu emprendedor. Después de una hora de escribe-borra y 2.754 'Buffs' y 34.987 'puajs' y unos pocos más ‘abandono ya’ acabo levantándome de la silla sin nada nuevo… espero que sea una racha…
Pues lo mismo me pasa con estos post… (ya se nota ¿no?)
Mientras, me entretengo con la apasionante aventura de la vuelta al Cole de mis enanos… igual es que pienso que si miro mucho el forro del libro de Cono me va a venir la inspiración de pronto…
Bueno, mis disculpas, queridos lectores (jejejeje) espero estar un poco más lúcida la semana que viene.